La Casa Targaryen es una de las dinastías más icónicas y poderosas en la historia de Westeros, y su papel es central tanto en la serie La Casa del Dragón como en el libro Fuego y Sangre de George R. R. Martin. Esta familia de origen valyrio es conocida por su estrecha relación con los dragones, su inclinación por la endogamia y su ambición implacable de mantener el Trono de Hierro. A lo largo de los eventos que culminaron en la Danza de los Dragones, la Casa Targaryen vivió sus momentos de mayor gloria y de más profundo conflicto.
Estandarte y Lema de la Casa Targaryen
Emblema Targaryen
La Casa Targaryen ostenta un emblema que muestra un dragón de tres cabezas, de color rojo sobre un fondo negro. Este dragón representa la fuerza, la conquista y el fuego, simbolizando el poder de los Targaryen y su control sobre los dragones.
Lema
El lema de la Casa Targaryen es «Fuego y Sangre». Este lema refleja el origen y la historia de la casa, marcada por conquistas violentas, guerras y el uso de dragones para imponer su dominio en Poniente, recordando que su poder se forjó a través de la destrucción y la fuerza.
Origen del Conflicto
El conflicto se originó tras la muerte del Rey Viserys I Targaryen, un monarca pacífico y popular que gobernó desde 103 hasta 129 d.C. Viserys había nombrado a su hija, Rhaenyra Targaryen, como su heredera, desafiando las costumbres de Westeros que favorecían a los herederos varones. Durante gran parte de su reinado, Viserys luchó por asegurar el derecho de su hija al trono, e incluso la nombró princesa de Rocadragón, una posición tradicionalmente ocupada por el heredero.
Sin embargo, al momento de la muerte de Viserys, una facción en la corte, conocida como los «Verdes», decidió coronar a su medio hermano, Aegon II Targaryen, el hijo de Viserys con su segunda esposa, Alicent Hightower. Este acto de usurpación desató la guerra civil, enfrentando a los «Negros», partidarios de Rhaenyra, contra los «Verdes», seguidores de Aegon II.
Personajes Clave
Rhaenyra Targaryen: Rhaenyra fue la hija mayor de Viserys I con su primera esposa, Aemma Arryn. Desde niña la instruyeron para gobernar y contaba con el apoyo de muchas casas poderosas. Rhaenyra era una mujer decidida y ambiciosa, pero también enfrentaba la dura realidad de ser una mujer en una sociedad dominada por hombres. Su reclamo al trono fue respaldado por su esposo, Daemon Targaryen, y sus hijos.
Aegon II Targaryen: Aegon II era el medio hermano de Rhaenyra, nacido del segundo matrimonio de Viserys con Alicent Hightower. Aunque no era el heredero designado, fue apoyado por una facción de la corte liderada por su madre y por el Lord de Desembarco del Rey, Otto Hightower, que también era Mano del Rey.
Daemon Targaryen: Hermano menor de Viserys I y tío de Rhaenyra, Daemon era un guerrero temido y un estratega astuto. Montaba al dragón Caraxes y jugó un papel crucial en la guerra. Su matrimonio con Rhaenyra consolidó la alianza entre los partidarios de la princesa, y fue uno de los líderes más destacados de los Negros.
Alicent Hightower: Alicent fue la segunda esposa de Viserys I y la madre de Aegon II. Aunque comenzó como una figura más bien secundaria, su ambición y su deseo de proteger a sus hijos la llevaron a convertirse en una de las principales artífices del conflicto.
Dragones en la Danza
La Danza de los Dragones fue la última guerra en la que los Targaryen utilizaron dragones como armas. Sin embargo, la guerra también resultó en la muerte de muchos de estos magníficos seres, lo que debilitó considerablemente el poder de la casa.
Dragones de los Negros:
- Syrax: Montura de Rhaenyra, un dragón dorado que se criado en el Pozo Dragón.
- Caraxes: Montado por Daemon Targaryen, conocido como el «Guiverno Sanguíneo» debido a su ferocidad en combate.
- Vermax: Dragón de Jacaerys Velaryon, hijo de Rhaenyra.
Dragones de los Verdes:
- Sunfyre: El dragón de Aegon II, famoso por su deslumbrante color dorado.
- Vhagar: Uno de los dragones más antiguos y grandes, montado por el príncipe Aemond Targaryen, hermano de Aegon II.
- Dreamfyre: Montado por Helaena Targaryen, hermana y esposa de Aegon II.
Batallas y Traiciones
La Danza de los Dragones estuvo marcada por varias batallas importantes y una serie de traiciones que cambiaron el curso del conflicto.
Batalla del Ojo de Dioses: Uno de los enfrentamientos más famosos de la guerra fue la batalla entre Daemon Targaryen y Aemond Targaryen sobre el lago conocido como el Ojo de Dioses. Daemon, montado en Caraxes, y Aemond, sobre Vhagar, lucharon hasta la muerte. Ambos dragones murieron en la batalla, y los cuerpos de Daemon y Aemond cayeron en las aguas del lago.
Batalla de Reposo del Grajo: En esta batalla, Rhaenys Targaryen, conocida como la «Reina que Nunca Fue», se enfrentó a Aemond Targaryen y a Aegon II. Aunque montaba a su dragón Meleys, sucumbió y murió en combate, lo que significó una gran pérdida para los Negros.
La Batalla del Gaznate: Esta batalla naval es una de las más importantes durante la Danza de los Dragones. Ocurre en las aguas del Cuello, donde la flota Velaryon, leal a Rhaenyra, se enfrenta a una alianza de los Verdes y la Triarquía. La Triarquía, conocida como las Tres Hijas, había sido un antiguo enemigo de los Velaryon durante la Guerra de los Peldaños de Piedra, pero en esta ocasión, se alían con los Verdes. La batalla es una de las más cruentas, y aunque los Velaryon salen victoriosos, la flota sufre graves daños, debilitando su capacidad para dominar el mar.
La Traición de los Hightower: Alicent Hightower, la segunda esposa de Viserys I y madre de Aegon II, desempeña un papel crucial en la conspiración que lleva a la coronación de su hijo en lugar de Rhaenyra. Larys Strong, conocido como el Patizambo, es un aliado clave de Alicent, que actúa como su confidente y manipula eventos a su favor.
Consecuencias de la Guerra
La Danza de los Dragones tuvo consecuencias devastadoras para la Casa Targaryen y Westeros. La guerra diezmó a la familia Targaryen, con la muerte de muchos miembros clave y la casi extinción de los dragones.
Caída de los Dragones: Tras la Danza, la mayoría de los dragones de Westeros habían muerto. Los pocos que quedaron eran más pequeños y débiles, y eventualmente también murieron, poniendo fin a la era de los dragones.
Destrucción de la Casa Targaryen: La guerra dejó a la Casa Targaryen fracturada y débil. Aegon II ganó la guerra, pero lo asesinaron poco después de tomar el trono. El hijo sobreviviente de Rhaenyra, Aegon III, fue coronado como rey, marcando el final del conflicto, pero el reino quedó devastado.
Impacto en Westeros: La Danza de los Dragones también debilitó a Westeros, con muchas casas nobles perdiendo poder e influencia. La desconfianza entre las casas aumentó, y el Trono de Hierro nunca volvió a tener el mismo nivel de autoridad que antes de la guerra.
Conclusión
La Danza de los Dragones fue una tragedia épica que cambió el curso de la historia en Westeros. Fue un conflicto interno que debilitó a la Casa Targaryen, condujo a la desaparición de los dragones y dejó una huella profunda en el reino. La guerra se recuerda como uno de los peligros de la ambición desmedida y la lucha por el poder dentro de la familia más poderosa de Westeros.